Sin mirar los márgenes
Recuerdo que alguien me reprochó que en los libros que repujo haya citas de otros libros, a esta persona le molestaba estas citas. Él alegaba que era una pose intelectual mía, de querer mostrar que leo libros. Atiné a escucharlo, mientras él se relamía con su pelo cano que acusaba una fuerte calva. Nada más falso me dije, mientras le escuchaba sentía ese halo acomplejado muy propio de ciertos intelectuales de la fronda. Es normal y rutinario, que para sustentar una idea cites a una autoridad en la materia, nada más alejado de cualquier pose intelectual o de soberbia libresca, pero el pobre hombre no entraba en razones. Digo esto porque trabajo en un ensayo sobre los trópicos y me he topado con el libro «Los Rolling Stones en Perú», confieso que lo leí de un tirón y no es para presumir de lectura como alega el tropical fauno citado. Está escrito de manera amena, eso sí, con muchas dosis de macho de pelo en pecho y con muchos tópicos sobre la floresta. Mi interés era saber la presencia de esta banda de rock en la Amazonía, pero me quedé con los crespos hechos. Se podía haber sacado más punta la presencia de Jagger en la floresta, se queda en el rumor, en el cotilleo –de repente el mundo de rock es de los murmullos, cultura que adolezco. En primer lugar, es un texto mentalmente pensado en el centro, en Lima, y luego en los alrededores. Con la presencia de uno de los integrantes de esta famosa y legendaria banda de rock en el palustre, quizás se pudiera haber raspado mejor. El título del libro menciona a la banda, pero en verdad, se centra casi todo en Mick Jagger. Pero podemos perdonar esos detalles y pasarlos. Aunque hay otros que no podemos. Los pobladores del marjal somos solo figurantes. En la cubierta del libro está una imagen con el rostro del ganador de parecidos con Mick Jagger, que se realizó al parecer en Isla Grande. Ese dato de por sí es una mina, pero quienes pergeñaron el libro no escarbaron más, se quedan con la foto –esa imagen es de realismo mágico de los trópicos y fue desaprovechada. En muchos párrafos brota ese machismo duro y ciego que se tiene en Lima y alrededores sobre la selva. Es más, hay una fotografía célebre de Jagger con tres chicas insulares, y el texto tampoco las menciona ni hace un guiño a esa suculenta historia. Es por ello, que decimos que el texto ha sido pensado para Lima y no para los alrededores. Una pena.