Dietario fluvial (II)
Fotografía: Claudia Donayre V.
Antes de subir al avión de vuelta a Lima hice un recorrido con mi hermano por el cementerio, tenía pendiente visitar la tumba de Jorge Gasché, fue una lluvia de emociones verlo al bosquesino como reza en su lápida, una persona que entregó sus reflexiones a la Amazonía y crítico con el quehacer antropológico y de otras ciencias sociales en esta parte del barrizal. Además, mi hermano quien ejerció brevemente de guía, me mostró el lugar del sepulcro de Fermín Fiscarraltd (sic, así está escrito en su tumba) y otras tumbas célebres como la del Víctor Morey Peña o la de un santón que la gente tiene gran devoción. Este osario es un espacio de la memoria de la ciudad que ha sido degradado por la incompetencia de las autoridades. Además, todavía con tiempo, me llevó por la ruta de Santa Clara, Rumococha, Santo Tomás, en verdad, está irreconocible, toda mi memoria de la adolescencia ha sido obliterada a golpe de ocupaciones revelando un grave problema de acceso a la vivienda digna que los políticos hacen la vista gorda. El caos urbano y la falta de planificación es lo primero que salva a la vista en esta ciudad que no encuentra el norte y que goza y celebra con frenesí películas inanes como «Isla Bonita». Ya en Lima buscaba en los libreros de viejo y de segunda mano la obra de Antonio Raimondi «El Perú», mi amigo Alfonso Castro me proporcionó un texto de él a quien agradecí encarecidamente. Los días pasaron rápido. La presentación en Lima de «Quebradura. Breviario fluvial de viajes» fue en el marco de la 44 edición de la Feria del Libro Ricardo Palma. Se contó con la participación de la profesora universitaria y poeta Andrea Cabel, a quien agradecemos por su tiempo y del bizarro editor Dante González, quien promovió la presentación en la feria y, en verdad, con admirables tablas ante las contingencias. La presentación en Miraflores estuvo llena de sorpresas agradables. El libro propició el recuentro con amigas que no veía desde hace varios lustros como Patty Ruíz, Rosy Sibina, Cuchita Rodríguez, Kitty Babilonia, en verdad, ha sido un subidón de entusiasmo. Además de familiares como Wilder, Raquel y María Pía Zegarra. O de Alberta Arenas, Richard Rojas, la prima Inés Villacís, Alfonso Castro, asumo la responsabilidad del olvido de algunos que no he citado. Al día siguiente puse la autógrafa en los libros de Rosy y Marcela Sibina en el estand de Pakarina, ellas son amigas del colegio quienes me recordaron (yo con rubor) lo que escribía cuando era adolescente. Caminando entre los estand de la feria me tropecé con la poeta amazónica Sui- Yun con quien hablamos brevemente. En la presentación de Lima han primado los reencuentros y «Quebradura. Breviario fluvial de viajes» ha sido un buen motivo. OTRO SÍ. El soporte visual y emocional fue las de mis sobrinos Rafael y Claudia, amén de mis padres que están infalibles en la primera fila de estas presentaciones.
Lima- Iquitos, noviembre y diciembre de 2023