Un alegato contra la homogenización libresca
Un día morado de octubre con muchas cosas en la cabeza me acerqué a la librería “Blanca Varela” del Fondo de Cultura Económica (FCE) en la calle Berlín, Miraflores. Huía de los días húmedos y grises de Lima que te persigue por donde uno va, enfadado por la indolencia ciudadana que inunda el contexto peruano. En la librería están en plena remodelación, el runrún es que van a poner una cafetería también. Es un binomio perfecto, libros y café. En esa reforma todo está de patas arriba. Pero, seguro con mucho esfuerzo las personas que trabajan allí han puesto una librería donde están libros del FCE en formato de bolsillo. Buscaba un libro que me sacudiera de estos días grises. Y husmeando los títulos me encontré uno que me llamó la atención, “Librovejero” de Álvaro Castillo Granada. Leí el índice, la contratapa y me animé a adquirirlo, fue un flechazo. Han sido días donde he gozado de su lectura con las sabrosas anécdotas alrededor del libro y los personajes de este objeto deseado que es el libro. El título del libro, el oficio y el mote a Alvaro Castillo se debe a Gabriel García Márquez, quien dijo así como hay ropavejero, sería mejor Librovejero que Libroviejero. Castillo Granada es quien proveía de libros a García Márquez mientras que el autor de “Cien años de soledad” estaba en plena ebullición en su cocina literaria. Los libros que él pedía no estaban en el llamado mercado, de ahí la utilidad del librovejero. A los largo del texto Álvaro Castillo va citando autores, títulos que no están en ese mundillo literario marcado por la publicidad y las grandes editoriales. Castillo Granada con este texto lanza un alegato contra la homogenización de los libros. Desgraciadamente por estos tiempos, al país que uno vaya encuentras los mismos libros y autores, pareciera que no hubiera variedad. Felizmente, hay lectores y amantes de la lectura como este libravejero que rompen lanzas a favor de una lectura más diversa. OTRO SI DIGO: Se puede seguir al libravejero Castillo Granada por FB en San Librario libros, donde va mostrando unas verdaderas joyas para la lectura.